Boicot de las jugadoras de Sudáfrica

   

Las «Banyana Banyana» se negaron a jugar un amistoso de preparación ante Botswana y desde la propia Federación fueron calificadas de «traidoras» y «mercenarias». Aquí te explicamos los motivos de la lucha de las futbolistas sudafricanas, próximas rivales de Argentina en el Mundial.

La Selección Sudafricana, que comparte el grupo con Argentina, Suecia e Italia, boicoteó el pasado domingo un partido amistoso de preparación para el Mundial ante Botswana en Johannesburgo. Esto forzó a la seleccionadora del conjunto africano, Desiree Ellis, a armar un equipo de emergencia. Entre las jugadoras había una niña de 13 años, integrante de un equipo local.

Las razones del boicot se deben a dos factores determinantes, uno es el mal estado del terreno de juego del Tsakane Stadium, motivo que generó mucho miedo con respecto a posibles lesiones a tan pocos días de comenzar el Mundial.

La otra causa tiene que ver con la decisión económica de SAFA (South African Football Association) de no pagarle a las futbolistas la parte que le otorga la FIFA (30 mil dólares a cada jugadora) por disputar le Copa del Mundo. En este sentido, el tesorero de la Federación las criticó: «No son razonables en sus demandas».

Lejos de calmar las aguas, un miembro de la Federación Sudafricana calificó a las jugadoras seleccionadas de su país como «traidoras» y «mercenarias».

Portia Modise, mítica capitana de las Banyana Banyana, pide que apoyen a las futbolistas  en sus reclamos de mejores condiciones, tanto de recursos como económicas.

“No se trata de faltarle el respeto al país, se trata de que el país nos ayude”, lanzó Modise en su discurso publicado a través de las redes sociales.

Fellow South Africans its time to show up for our @Banyana_Banyana ladies.

Let us all show them love and support as they preparing to represent our country in the Women's World Cup 2023. pic.twitter.com/mrHvaC28mk

— PortiaBashinModise (@modiseportia12) July 3, 2023

La entrenadora Desiree Ellis no hizo declaraciones al respecto del reclamo de sus futbolistas, a pesar de que estas estuvieron allí mismo viendo el encuentro. El estado del terreno de juego, con más tierra que césped, el riesgo de sufrir lesiones y el reparto de las primas por jugar el Mundial llevó la situación al límite.

Antes del debut mundialista ante Suecia, las sudafricanas tienen un último compromiso preparatorio ante Costa Rica, el 14 de julio.