A sus 39 años, la arquera santafesina disputará su cuarto Mundial defendiendo la camiseta Argentina, siendo la única jugadora de nuestro país que estuvo presente en todas las citas mundialista que jugó el seleccionado nacional. Un emblema.
En la antesala del debut de la Selección Argentina en el Mundial de Australia – Nueva Zelanda, paramos la pelota debajo del arco para repasar la historia de la defensora de los tres palos albicelestes: Vanina Noemí Correa.
Como la gran mayoría de futbolistas de nuestro país comenzó jugando al fútbol desde niña con varones en su Villa Gobernador Gálvez natal y siempre tuvo claro que su lugar dentro de la cancha era el arco. “En el arco siempre tenés que estar bien. Yo eso lo sé desde que decidí que éste iba a ser mi puesto, a mis 14 años. Empecé a jugar a los 6 o 7 con los varones, en Villa Diego Oeste, un club de acá, de Gálvez. Ahí era defensora. Hasta que llegó la hora de pasar a cancha de 11 y me dijeron que no podía porque era mujer. Así que me pasé a fútbol 7, fui al arco y no pude dejar más”, recuerda Correa en una nota para La Nación.
Ya definida como arquera, a los 16 debutó en Rosario Central, donde estuvo tres años y luego fichó en Boca Juniors. Sus grandes actuaciones hicieron que el cuerpo técnico de la Selección Argentina posara sus ojos en ella para dar inicio a una historia que hoy se mantiene más vigente que nunca.
Los primeros pasos en la Selección Argentina y el Mundial 2003
El debut de Vanina Correa en la Selección Mayor se produjo el 9 de abril de 2003 en el Sudamericano que se disputaba en Salta, Lima (Perú) y Loja (Ecuador). Aquel día, “La Flaca” fue titular y Argentina derrotó 3-0 a Paraguay por la primera fecha del Grupo C.
De los cinco partidos que Argentina jugó en este certamen, Vanina fue titular en cuatro (en el segundo encuentro la titularidad fue para Romina Ferro), donde cosechó un triunfo, una derrota, dos empates y recibió seis goles. El equipo albiceleste quedó segundo en la fase final y clasificó por primera vez en su historia a un Mundial.
La Copa del Mundo se desarrolló ese mismo año en Estados Unidos y pese a que Correa tuvo un buen rendimiento en el Sudamericano, durante el Mundial la arquera titular fue Romina Ferro.
El combinado argentino integró el Grupo C y cayó derrotado en los tres partidos (6-0 frente a Japón, 3-0 ante Canadá y 6-1 contra Alemania), Correa no sumó minutos.
Batacazo en el Sudamericano 2006 y el duro Mundial de 2007
La arquera santafesina siguió sumando partidos en la Selección nacional y durante el Sudamericano de 2006 nuevamente alternó la titularidad con Romi Ferro.
Vanina fue parte de este plantel histórico que logró conquistar el certamen tras vencer 2-0 a Brasil en el último partido de la fase final y así obtener el único título que por ahora tiene la Selección Argentina, además de cortar con la hegemonía brasileña y de lograr la clasificación al Mundial de China 2007 y los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
En la Copa del Mundo Argentina integró el Grupo A con tres monstruos: Alemania, Inglaterra y Japón. En el primer partido ante las alemanas, llegó la gran oportunidad para Correa y fue titular, sin embargo el elenco germano se impuso por 11-0 sin atenuantes.
En los dos encuentros posteriores la albiceleste volvió a perder (1-0 ante Japón y 6-1 contra Inglaterra) y Vanina fue al banco.
Al año siguiente, en los Juegos Olímpicos, Correa atajó en los tres partidos, aunque el equipo dirigido por Carlos Bollero no logró avanzar de fase. En lo que hasta el momento fue la única participación de Argentina en un JJOO, las derrotas fueron 2-1 ante Canadá, 1-0 contra Suecia y 2-0 frente a China.
El alejamiento del fútbol
En el año 2010 y tras quedarse con el tercer puesto en la Copa Libertadores, vistiendo la camiseta de Boca Juniors, Correa decidió alejarse del fútbol para inicar otra búsqueda: ser madre. En 2014, luego del tratamiento de fertilidad que hizo con su compañera de entonces, nacieron los mellizos Romeo y Luna.
En paralelo, la Selección Argentina atravesaba un momento complicado, debido a que no logró clasificar a los Mundiales de 2011 ni de 2015, para luego quedar inactiva por dos años.
Regreso a la Selección y reivindicación en el Mundial 2019
Con el regreso de Carlos Borrello a la conducción de la albiceleste, también se produjo la vuelta de Vanina Correa al arco argentino. Aunque no fue fácil convencerla, «La Flaca» aceptó el desafío y el 22 de octubre de 2017 volvió a calzarse los guantes en el partido amistoso ante Chile que terminó 2 a 2.
En el 2018 se disputó la Copa América dónde las futbolistas argentinas alzaron la voz con la famosa foto del «Topo Giggio» en reclamo de mejores -y básicas- condiciones laborales. Les tocó jugar el Repechaje para clasificar al Mundial ante Panamá y la Selección dio sobradas muestras de que la realidad estaba empezando a cambiar.
Con Correa en el arco, Argentina goleó 4-0 en la ida y empató 1-1 en la vuelta, logrando así la clasificación al Mundial de Francia 2019.
Pero el contexto seguía siendo complicado. Vanina afrontó la preparación para su tercer Mundial con las obligaciones propias del amateurismo: trabajaba como cajera en la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez al mismo tiempo que entrenaba y cuidaba de los mellis. «Tengo que agradecer a ‘la Muni’ por acompañarme, darme los días que necesitaba, estoy muy agradecida al intendente y a todo su equipo», aseguró en los días previos al debut en la Copa del Mundo.
En Francia 2019 Argentina integró el Grupo D junto a Japón, Inglaterra y Escocia, y Correa fue una de las grandes figuras del combinado nacional.
En el primer partido ante Japón, potencia y subcampeón del mundo, la santafesina logró mantener su arco en cero, y con el empate la Selección pudo sumar su primer punto en un Mundial. Un paso gigante.
Pero el pico máximo de esplendor para Vanina llegó ante Inglaterra. Si bien Argentina perdió por 1-0, Correa fue clave para evitar una goleada y además le atajó un penal a Nikita Parris.
En el tercer y último partido, Argentina logró remontar un 3-0, terminó empatando con Escocia 3 a 3, sumando de esta manera su segundo punto en una Copa del Mundo.
Si bien no le alcanzó para avanzar a octavos, la mejoría en el rendimiento y en la obtención de puntos fue notable. Correa, por su parte, dejó atrás los días en el banco, las goleadas sufridas y la indiferencia del público, para convertirse indiscutiblemente en una de las referentes del plantel y de las favoritas de las hinchas.
Mundial 2023 y «Una mochila de ilusión»
Tras obtener el tercer puesto en la Copa América 2022, la Selección Argentina logró clasificar al Mundial de Australia – Nueva Zelanda 2023, donde Vanina Correa dirá presente, siendo la única futbolista que fue citada en todas las ediciones que el país participó.
En el partido de despedida del seleccionado en San Nicolás, que fue triunfo ante Perú por 4 a 0, La Diez le consultó a la arquera cómo llegaba a la Copa del Mundo comparando con las ediciones anteriores: «Fueron Mundiales diferentes, todo fue en crecimiento. Fueron creciendo las selecciones, fuimos creciendo nosotras, y si bien quedamos un poquito lejos de las potencias, nos preparamos para poder llegar lo más lejos posible«, aseguró la uno.
Además, Vanina le agradeció al público que viene acompañando a la Selección y que hace sentir el apoyo de cara al Mundial: «Nos cargamos una mochila de ilusión», cerró la dueña del arco albiceleste.
La ficha
- Nombre completo: Vanina Noemí Correa
- Edad: 39
- Fecha de nacimiento: 14/08/1983
- Ciudad de nacimiento: Villa Gobernador Gálvez (Santa Fe)
- Club actual: Rosario Central
- Trayectoria: Rosario Central, Boca Juniors, Banfield, Renato Cesarini, Social Lux, San Lorenzo, Espanyol, Universidad de Chile.
- Debut en la Selección: 9 de abril de 2003, Sudamericano (Argentina 3 – Paraguay 0)
- Partidos con la Selección: 58 (de los que se tiene registro)
- Mundiales: Estados Unidos 2003, China 2007, Francia 2019, Australia-Nueva Zelanda 2023
Fuente: recopilación de datos de la Selección Argentina de Stefi León en Fútbol Femenino Argentino
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